La Iglesia Católica de Portugal pidió este viernes perdón a las víctimas de agresiones sexuales cometidas por religiosos luego de la publicación de un informe que expuso miles de abusos sufridos por menores de edad durante más de medio siglo.
«Con dolor pedimos perdón nuevamente a todas las víctimas de abusos sexuales en el seno de la Iglesia Católica de Portugal», indica un comunicado de los obispos portugueses reunidos en la famosas ciudad santuario de Fátima.
El pedido de perdón tendrá una «expresión pública en abril» en Fátima y se erigirá un monumento para homenajear a las víctimas durante las próxima Jornada Mundial de la Juventud, a inicios de agosto en Lisboa, indicó la Asamblea Plenaria Extraordinaria de la Conferencia Episcopal Portuguesa.
«Reafirmamos nuestra firme intención de hacer todo lo posible para que los abusos no se vuelvan a repetir», agregó el comunicado que prometió «tolerancia cero con todos los abusadores y con los que, de alguna manera, ocultaron los abusos llevados a cabo en el seno de la Iglesia Católica».
El 13 de febrero, un informe elaborado por un grupo de expertos independientes reveló que miembros del clero católico portugués abusaron sexualmente de al menos 4.815 menores desde 1950.
Los abusos fueron encubiertos por la jerarquía eclesiástica de forma «sistémica», subrayaron en sus conclusiones, tras escuchar más de 500 testimonios.